martes, 12 de marzo de 2019

Qué entendemos por Interpretacion de patrimonio

A partir de un patrimonio cultural material, se pueden contar las historias de una comunidad, pero en varios casos, la actividad ligada a ese patrimonio no viene con una comunicación amena, no atrae la atención de las personas. Ello puede conllevar con el tiempo al olvido y descuido del valor material/inmaterial, y la pérdida de historias que hacen a la identidad de una comunidad.  Por eso cuando se trabaja en la creación de productos culturales, el patrimonio cultural que queremos dar a conocer tiene que estar ligado con un trabajo de interpretación de patrimonio que emane el espíritu de ese bien cultural para que los visitantes se vayan con un recuerdo memorable sobre el patrimonio y el lugar. Ante la importancia de esta disciplina, en este apartado extraemos definiciones y características principales.

Cuando hablamos de Interpretación del Patrimonio (IP) nos referimos a la “interpretación” que representa un conjunto de técnicas de comunicación, aplicables en cualquier sector, con la finalidad de revelar un significado profundo y desarrollar ciertas actitudes en el público visitante. (Jorge Morales Miranda)

Hay varias definiciones para comprender qué es Interpretación del Patrimonio. La utilizada por la Asociación para la Interpretación del Patrimonio[1], es la siguiente: “La interpretación del patrimonio es el “arte” de revelar in situ el significado del legado natural o cultural al público que visita esos lugares en su tiempo libre.” Sam Ham y Jorge Morales (2008) exponen: “La interpretación efectiva es un proceso creativo de comunicación estratégica, que produce conexiones intelectuales y emocionales entre el visitante y el recurso que es interpretado, logrando que genere sus propios significados sobre ese recurso, para que lo aprecie y disfrute”. (p. 4)

Es un “arte”, puesto que para llevarla a cabo se requieren grandes dosis de creatividad, y no la simple aplicación de las recetas, que las hay, y muchas.[2]
La interpretación, según canadiense Yorke Edwards (1976) posee cuatro características que hacen de ella una disciplina especial:

1) es comunicación atractiva,
2) ofrece una información breve,
3) es entregada en presencia del objeto en cuestión, y
4) su objetivo es la revelación de un significado.

Según Wagar (1976), la interpretación no será efectiva a menos que:

a) atraiga y mantenga la atención del visitante;
b) éste entienda y retenga cierta información;
c) que gracias a esa información adopte una actitud positiva; y
d) se observe en él un cambio permanente de comportamiento.



Ilustración 1: Características de IP
Fuente: Elaboración propia combinando La interpretación, según canadiense Yorke Edwards (1976)-cuadro izquierdo- y la efectividad de la interpretación según Wagar (1976) – lado derecho.
 
Extraemos unos textos del libro Interpretación de patrimonio donde se desarrollan los principios de Freeman Tilden, reconocido como el padre de la Interpretación (1957):

● La interpretación debe provocar atención, curiosidad e interés en la audiencia: Si no atraemos la atención, difícilmente podremos transmitir un determinado mensaje o unos contenidos al público visitante. Ése es el primer paso (y contra él compiten la espectacularidad, la excesiva argumentación o la imprecisión). Colores, formas, tipos de letra bien escogidos, y hasta el tono de voz del guía, influirán en el atraer la atención.

● Debe relacionarse con la vida cotidiana del visitante. El estilo del lenguaje debe poder conectarse con el “yo” y con los esquemas mentales del visitante, para que éste “personalice” la información que recibe y la entienda como algo útil y de interés para él. Esto facilitará que la atención se mantenga. No es lo mismo decir: “El perímetro de esta fortaleza es de 950 metros”, que: “Si usted recorriese los muros del fuerte, abarcaría casi un kilómetro”.
El mensaje debe ser directo y tiene que aludir al receptor, a su ego, utilizando el “usted” (o el “tú”), y/o incluir analogías o ejemplos relacionados con la vida cotidiana de los visitantes.

● Debe revelar la esencia del significado del lugar u objeto: Es un “destilado” de la información disponible, porque no siempre se puede transmitir al visitante todo lo que se sabe acerca de un determinado sitio o fenómeno (natural o cultural). En interpretación sólo hay posibilidad de revelar el espíritu del lugar. Por ello, además de la brevedad del mensaje, éste debe ser claro y fácil de entender por cualquier persona que haya cursado por lo menos el equivalente a octavo de primaria (esto es para el caso de la interpretación autónoma o autoguiada, como en folletos y textos en paneles. El guía tiene la posibilidad de adaptarse al público.

● Debe unir las partes en un todo: Cada lugar puede presentar diferentes aspectos y contener muchos detalles, los que habrá que interrelacionar para transmitir una idea coherente. Si al público se le presentan relaciones, éste comprenderá mejor y podrá recordar con mayor facilidad. Por esto, toda la presentación debería girar en torno a una idea central o frase-tema; una oración (sujeto, verbo y predicado) similar a un titular de prensa, que sirva de adhesivo o aglutinador para el resto de los conceptos e ideas expuestas. Esa frase u oración tendría que ser recordable por el público.

● Es un arte, por lo tanto, debe producir un impacto en el público: Esto implica que al público, además de transmitirle significados, debe producirle sensaciones. Y los responsables de la interpretación - como los buenos comunicadores– deben aplicar las técnicas disponibles con mucha creatividad para llegar al corazón de las personas. La interpretación debe impactar emocionalmente en el destinatario. Sorpresa, añoranza, indignación, melancolía, alegría, pena, sensación de empatía, etcétera... no debe dejar indiferente. Sin emoción no hay interpretación.

● La interpretación tiene que intentar ir más allá del mero hecho de la visita. (Morales, 2000). Como instrumento de intervención social, debería contribuir a la prevención y solución de problemas ambientales, culturales, sociales o del patrimonio en general, provocando un efecto positivo que perdure en los visitantes. Teniendo en cuenta estos principios, la interpretación puede convertirse en una herramienta altamente eficaz en museos, parques nacionales y sitios históricos, pues seduce, estimula, invita a la reflexión, y provoca respuestas positivas en los visitantes, vinculándolos incluso afectivamente al lugar.
Esta vinculación afectiva permitiría considerar que, a través de la interpretación, es posible conseguir un aprecio por el patrimonio visitado y, merced a ese aprecio, un apoyo a la conservación del mismo. En otras palabras, podemos decir, “no se cuida lo que no se conoce” para marcar la importancia de comunicación tanto del patrimonio natural, como del cultural.

Ventajas de la interpretación

La interpretación además de un proceso de comunicación es considerada un instrumento de gestión, la cual tiene múltiples beneficios. A continuación presentamos las ventajas de este instrumento, extraído de Morales, Jorge. 2001. Guía Práctica para la Interpretación del Patrimonio:

- Favorece la comprensión del usuario por el lugar que visita.
- Brinda mejores oportunidades de disfrute a los excursionistas.
- Reduce el número de visitantes insatisfechos.
- Reduce el incumplimiento de las normas por campistas, excursionistas y visitantes en general.
- Evita tener que recordar y hacer cumplir leyes y normas.
- Disminuye las posibilidades de interferencia entre los visitantes, evitando el conflicto social entre ellos.
- Reduce la intrusión de la administración en las actividades, manteniendo la sensación de libertad del visitante.
- Reduce el vandalismo.
- Reduce los costes de operación y mantenimiento.
- Favorece a otras unidades de gestión del lugar protegido (por ejemplo: vigilancia, restauración, mantenimiento).
- Puede explicar el papel y las actividades de la institución, de forma que el público comprenda la función de ésta.
- Fortalece la imagen del organismo como resultado de unas relaciones públicas positivas.
- Informa al público, y un público bien informado puede tomar decisiones juiciosas respecto a la gestión de su patrimonio.
- Hace comprender acciones impopulares (caza controlada, manejo de poblaciones de fauna, vallado de sitios, etc.).
- Da a conocer las necesidades del lugar, favoreciendo el apoyo del público.
- Permite influir en los movimientos de las personas desde áreas vulnerables hacia otras que puedan soportar mejor el impacto humano.
- Puede colaborar en la promoción de un área, donde el turismo sea esencial para la economía de la zona.



[1] La AIP es una asociación de personas vinculadas al ámbito de la interpretación del patrimonio. Su objetivo es la difusión de esta disciplina, el intercambio de información, la formación y capacitación, y la promoción de las buenas prácticas en el ámbito de la comunicación con los visitantes.
[2] Jorge Morales Miranda, Carlos Fernández Balboa y otros autores. (2007) La interpretación del Patrimonio en la Argentina, estrategias para conservar y comunicar bienes naturales y culturales. Editorial APN.






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